Antiguamente
la fabricación de jabón casero se hacía en casa, pero hoy es una tradición que
se está perdiendo y sin embargo es una actividad sencilla y muy gratificante,
además de una forma útil de reciclar los aceites de frituras producidos en las
casas. El uso de esencias y colorantes naturales mejora el aspecto del
producto. Con los alumnos se planteó esta experiencia como una investigación
teniendo los alumnos que averiguar cuales eran las cantidades más adecuadas de
colorante y aroma para que permanecieran en el jabón.
viernes, 6 de julio de 2012
fabricacion industrial del jabon
Las materias primas se mezclan con agua hasta que forman una pasta.
Después se realiza la atomización, que consiste en transformar la pasta
en polvo:
- La pasta pasa por un tubo a presión y entra en una gran torre, donde es "rociada" con aire caliente a contracorriente.
- El aire evapora el agua de la pasta y se forma el polvo (es más o menos fino según la presión con la que ha salido del tubo y el diámetro de los orificios del "rociador").
- Algunos de los ingredientes, que no pueden resistir la temperatura del aire caliente o la humedad, se añaden al polvo obtenido después de la atomización.
- A continuación, el polvo se revuelve en un tambor giratorio.
- Finalmente, pasa por un cedazo que separa las partículas demasiado finas o gruesas, esto hace un contraste en los diferentes tipos de jabones que podemos encontrar en los mercados.
segundo metodo de obtencion del jabon
En este método primero se produce la ruptura química de la grasa, y se
obtiene la glicerina y los ácidos grasos; éstos se separan antes. Luego
se produce la sal del ácido graso y el alcalino
primer metodo de obtencion del jabon
En el primer método se produce la saponificación directamente sobre el
aceite, se hace reaccionar el alcalino con la grasa, y se obtiene el
jabón y glicerina. Este método tiene como desventaja que es más difícil la separación de la glicerina y el jabón.
accion detergente del jabon
Los jabones ejercen su acción limpiadora sobre las grasas en
presencia del agua debido a la estructura de sus moléculas. Éstas tienen
una parte liposoluble y otra hidrosoluble.
El componente liposoluble hace que el jabón moje la grasa disolviéndola y el componente hidrosoluble hace que el jabón se disuelva a su vez en el agua.
Las manchas de grasa no se pueden eliminar sólo con agua por ser insolubles en ella. El jabón en cambio, que es soluble en ambas, permite que la grasa se diluya en el agua.
Cuando un jabón se disuelve en agua disminuye la tensión superficial de ésta, con lo que favorece su penetración en los intersticios de la sustancia a lavar. Por otra parte, los grupos hidrofóbicos del jabón se disuelven unos en otros; mientras que los grupos hidrofílicos se orientan hacia el agua generando un coloide, es decir, un agregado de muchas moléculas convenientemente orientadas. Como las micelas coloidales están cargadas y se repelen mutuamente, presentan una gran estabilidad.
El componente liposoluble hace que el jabón moje la grasa disolviéndola y el componente hidrosoluble hace que el jabón se disuelva a su vez en el agua.
Las manchas de grasa no se pueden eliminar sólo con agua por ser insolubles en ella. El jabón en cambio, que es soluble en ambas, permite que la grasa se diluya en el agua.
Cuando un jabón se disuelve en agua disminuye la tensión superficial de ésta, con lo que favorece su penetración en los intersticios de la sustancia a lavar. Por otra parte, los grupos hidrofóbicos del jabón se disuelven unos en otros; mientras que los grupos hidrofílicos se orientan hacia el agua generando un coloide, es decir, un agregado de muchas moléculas convenientemente orientadas. Como las micelas coloidales están cargadas y se repelen mutuamente, presentan una gran estabilidad.
formas de uso de la saponificacion
Para saber cuánta sosa se necesita para saponificar una cantidad de una grasa concreta, sólo hay que multiplicar dicha cantidad por el valor correspondiente que aparece en la tabla. Por ejemplo, para saponificar totalmente 100g de aceite de oliva (en la tabla su parámetro es de 0,134) basta multiplicar 100 x 0,134 = 13,4g de sosa necesitaremos.
En el caso de que vayamos a hacer un jabón con diferentes aceites, habría que buscar la cantidad necesaria de sosa para cada tipo de aceite concreto, y luego sumarlas todas. También por eso, en las recetas de jabón, si queremos sustituir un aceite por otro, también habrá que ajustar la cantidad de sosa necesaria.
En el caso de que vayamos a hacer un jabón con diferentes aceites, habría que buscar la cantidad necesaria de sosa para cada tipo de aceite concreto, y luego sumarlas todas. También por eso, en las recetas de jabón, si queremos sustituir un aceite por otro, también habrá que ajustar la cantidad de sosa necesaria.
Saponificación - Reacción química del jabón
Se entiende por saponificación la reacción que produce la formación de jabones. La principal causa es la disociación de las grasas en un medio alcalino, separándose glicerina y ácidos grasos. Estos últimos se asocian inmediatamente con los álcalis constituyendo las sales sódicas de los ácidos grasos: el jabón. Esta reacción se denomina también desdoblamiento hidrolítico y es una reacción exotérmica.
La reacción típica es:
ÁCIDOS GRASOS + SOLUCION ALCALINA = JABÓN + GLICERINA.
Así es como al mezclar los ácidos grasos (principales componentes de las grasas animales y de los aceites vegetales) con una solucion alcalina (hecha a partir de una mezcla de agua y un álcali, como por ejemplo la sosa), se obtiene el jabón (que será realmente suave, porque además el otro subproducto que se obtiene de esta reacción es la glicerina).
El álcali es imprescindible para que se produzca esa reacción, pero hay que tener en cuenta que por sí solo es un elemento cáustico muy peligroso, cuyo manejo implica tomar una serie de precauciones muy importantes para manipularlo con seguridad. Los álcalis más utilizados en la fabricación del jabón son la sosa (hidróxido sódico, NaOH) y la potasa (hidróxido potásico, KOH). Por eso, es necesario tener mucha experiencia y unos conocimientos muy amplios sobre los álcalis y sus reacciones químicas, para proceder a realizar una saponificación que ofrezca totales garantías de que el producto final obtenido no entrañe riesgo alguno para la piel.
Esto no significa que la saponificación sea un proceso terriblemente peligroso, sino más bien muy delicado de realizar: Así, por ejemplo, si en la reacción anterior hay un exceso de sosa, el producto resultante será una masa cáustica inservible; mientras que si por el contrario , la cantidad de sosa es insuficiente, el producto resultante será una mezcla grumosa de aceites, que en nada se parecerá tampoco al jabón. Es por eso que para realizar un buen jabón, perfectamente saponificado, y con unas excelentes cualidades limpiadoras y emolientes, aparte de una gran experiencia y conocimientos de la saponificación, se necesita conocer también una serie de tablas con parámetros y proporciones muy concretas de cada uno de los elementos que constituyen la reacción, así como su correcta formulación.
La reacción típica es:
ÁCIDOS GRASOS + SOLUCION ALCALINA = JABÓN + GLICERINA.
Así es como al mezclar los ácidos grasos (principales componentes de las grasas animales y de los aceites vegetales) con una solucion alcalina (hecha a partir de una mezcla de agua y un álcali, como por ejemplo la sosa), se obtiene el jabón (que será realmente suave, porque además el otro subproducto que se obtiene de esta reacción es la glicerina).
El álcali es imprescindible para que se produzca esa reacción, pero hay que tener en cuenta que por sí solo es un elemento cáustico muy peligroso, cuyo manejo implica tomar una serie de precauciones muy importantes para manipularlo con seguridad. Los álcalis más utilizados en la fabricación del jabón son la sosa (hidróxido sódico, NaOH) y la potasa (hidróxido potásico, KOH). Por eso, es necesario tener mucha experiencia y unos conocimientos muy amplios sobre los álcalis y sus reacciones químicas, para proceder a realizar una saponificación que ofrezca totales garantías de que el producto final obtenido no entrañe riesgo alguno para la piel.
Esto no significa que la saponificación sea un proceso terriblemente peligroso, sino más bien muy delicado de realizar: Así, por ejemplo, si en la reacción anterior hay un exceso de sosa, el producto resultante será una masa cáustica inservible; mientras que si por el contrario , la cantidad de sosa es insuficiente, el producto resultante será una mezcla grumosa de aceites, que en nada se parecerá tampoco al jabón. Es por eso que para realizar un buen jabón, perfectamente saponificado, y con unas excelentes cualidades limpiadoras y emolientes, aparte de una gran experiencia y conocimientos de la saponificación, se necesita conocer también una serie de tablas con parámetros y proporciones muy concretas de cada uno de los elementos que constituyen la reacción, así como su correcta formulación.
jueves, 5 de julio de 2012
tipos de jabon
Existen innumerables tipos de jabón; las diferencias pueden estar
marcadas por la consistencia, el olor, la forma, el color, la textura, o
sus propiedades limpiadoras o terapéuticas. Algunos de los más
conocidos tipos de jabones son:
- Jabón de Marsella.
- Jabón de Castilla.
- Azul y blanco portugués.
- Jabón de Brea.
- Jabón de coche.
- Para afeitar.
- Jabón de Alepo. Fabricado en Alepo, Siria, utilizando extractos de laurel y aceite de oliva.
jabon de afeitar |
Composición del jabon
El jabón generalmente es el resultado de la reacción química entre un álcali (generalmente hidróxido de sodio o de potasio) y algún ácido graso;
esta reacción se denomina saponificación. El ácido graso puede ser de
origen vegetal o animal, por ejemplo, manteca de cerdo o aceite de coco.
El jabón es soluble en agua y, por sus propiedades detersivas, sirve comúnmente para lavar.
Tradicionalmente es un material sólido, aunque también es habitual
verlo en forma líquida o en polvo. En realidad la forma sólida es el
compuesto "seco" o sin el agua que está involucrada durante la reacción
mediante la cual se obtiene el jabón, y la forma líquida es el jabón
"disuelto" en agua, en este caso su consistencia puede ser muy viscosa o
muy fluida.
metodos de obtencion del jabon
La obtención de jabón es una reacción que consiste en la hidrólisis de un éster.
ÉSTER + SOSA =====> JABÓN + ALCOHOL
En el caso del aceite que hemos usado el compuesto predominante es el trioleato de glicerina y la reacción correspondiente es:
Trioleato de glicerina (aceite de oliva) + hidróxido sódico =====> JABÓN + glicerina
ÉSTER + SOSA =====> JABÓN + ALCOHOL
En el caso del aceite que hemos usado el compuesto predominante es el trioleato de glicerina y la reacción correspondiente es:
Trioleato de glicerina (aceite de oliva) + hidróxido sódico =====> JABÓN + glicerina
como hacer jabon casero
voy a explicar la forma de hacer jabón casero, tal y como se ha
venido haciendo hasta hace unos años atras. Ahora no es muy normal que
en los hogares que se haga jabón, pero hasta hacia bien poco, nuestros
abuelos, tenian la "receta" para hacer su propio jabón casero.
para hacer nuestro jabon necesitaremos lo siguiente:
Echamos en el recipiente, la sosa cáustica y añadimos el agua con mucho cuidado, ya que la sosa cáustica puede quemarnos la piel, asi que procura no tocarla.
Ahora es el momento de ir añadiendo el aceite poco a poco, mientras con la cuchara de madera vamos moviendo la mezcla. Este proceso debemos prolongarlo durante un buen rato, una hora aproximadamente, hasta que tengamos una pasta espesa de color blanco.
Ahora dejamos reposar durante un par de días y listo ya tenemos nuestro jabón casero.
para hacer nuestro jabon necesitaremos lo siguiente:
- Un recipiente de barro, metal o cristal
- Una cuchara de madera
- 3 litro de agua
- 3 litro de aceite (usado de freir)
- 500 gramos de sosa cáustica.
Echamos en el recipiente, la sosa cáustica y añadimos el agua con mucho cuidado, ya que la sosa cáustica puede quemarnos la piel, asi que procura no tocarla.
Ahora es el momento de ir añadiendo el aceite poco a poco, mientras con la cuchara de madera vamos moviendo la mezcla. Este proceso debemos prolongarlo durante un buen rato, una hora aproximadamente, hasta que tengamos una pasta espesa de color blanco.
Ahora dejamos reposar durante un par de días y listo ya tenemos nuestro jabón casero.
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